Todos conocemos a alguien que actúa de ese modo, tienen la increíble capacidad de hacerlo y que aunque suceda en nuestras narices no nos demos cuenta, y justo es cuando ya ha pasado el tiempo cuando vemos lo que ha sucedido.
Lo hemos visto siempre, pero al escuchar esta mañana en la radio una referencia al escándalo sucedido ayer en TVE me ha venido a la mente. Ayer los políticos que están dentro del consejo de RTVE (siempre me pregunté qué hacen los políticos mandando en un medio de comunicación, pero es evidente, si quieres manipular a las masas tienes que controlar los medios) decidieron oficializar la censura previa informativa (realmente da la sensación que existe desde hace mucho tiempo, pero es echarle mucho valor,o mucha caradura, oficializarlo) y lo que es más delirante es que representante (no sé de que partido) que lo propuso para votación ¡se abstuvo!, ¡es un fenómeno!, ¡es el paradigma del que siembra cizaña!.
Era yo muy niño cuando descubrí lo que significaba la palabra cizaña, fue gracias a un cómic de Asterix que precisamente tenía ese título: "La Cizaña"; pero el desconocimiento de la palabra no me había impedido conocerla, quizá no entre mis amigos (aún éramos unos niños, podríamos ser unos pequeños cabronazos, pero se nos veía venir) pero sí entre los "maduros adultos". Han pasado los años, he crecido, dudo si he madurado ya que eso lo tendrá que valorar la gente, pero conforme he crecido he visto como la cizaña ha crecido conmigo, a mi alrededor, y he visto como todo el mundo sin excepción la ha sembrado alguna vez, pero también he visto como hay gente que se dedica a tiempo completo a su siembra, desconozco la causa pero imagino que algún beneficio les reportará.
No es que personalmente me haya sucedido nada relacionado con ello, pero la anécdota político-televisiva que antes comentaba me hace ver que precisamente de esta última clase son nuestros "amados" líderes; ansían dividir a como de lugar, enfrentar cueste lo que cueste, plantear situaciones de blancos y negros (que no de grises, nota para evitar que se escandalicen los políticamente correctos: ¡no hablo de razas ni de policías de Franco!), todo con un único fin, crear un caladero de votos sumiso y asegurarse con ello una poltrona; lo peor es que un planteamiento tan pueril funciona, tenemos lo que nos merecemos.
¡Salud! (si os dejan)
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