En situaciones así ¿qué mejor que el sueño podría hacer que se evadiese de la realidad?, un sueño reparador haría que su mente se despejase, que su cuerpo descansase y que (a lo mejor) algo mágico hiciese que las cosas cambiasen cuando despertase; esto último era inviable pero está claro que de ilusión también se vive, solo hay que ver las caras de felicidad de los niños para darse cuenta de ello. Pero no, no le funcionaba, soñaba por la noche con lo que vivía por el día, lo que hacía que su mente no solo no descansase, sino que se agotaba más, era un circulo vicioso, y no conseguía salir de él, y por desgracia no sabía si lo conseguiría.
Era un simple trabajador al que "no pagaban por pensar", no un político o un sindicalista, ironías de la vida, pero parecía que él sí se había caído, ellos no.
¡Salud!
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