miércoles, 16 de marzo de 2011

Debut

Este será mi debut en el mundo del blog; tras ello aparece la primera de las dudas ¿de que escribo?.

Lo primero que se me pasó por la cabeza fue hablar de la noticia que, desgraciadamente, está monopolizando al mundo en todos los sentidos, la gran desgracia acaecida en Japón por causa de un cúmulo de combinaciones fatales; leanse: el terremoto de mayor intensidad en la historia nipona, un brutal tsunami y que dicho tsunami finalmente afecte a una zona de una isla con una "extraordinaria abundancia" en centrales nucleares.

A pesar de ello me decidí por no escribir sobre ese tema hoy y hacer referencia a la "curiosidad" del día; en un colegio asturiano han prohibido a los niños jugar al fútbol en el patio ya que ¡el fútbol no es integrador!, esta mañana el director del colegio comentaba en los microfonos de RNE que no era ese el motivo sino ¡la falta de seguridad si los niños jugaban!, ya que podían dar un balonazo a otro chiquillo. Analicemos el planteamiento de este preocupado educador; los niños no pueden jugar a deportes de equipo ya que los que están fuera del equipo no pueden jugar (veo que no se plantea en ningún momento que un niño pueda no querer jugar al fútbol), y por otro lado puede ser que un balón golpee a un pobre infante (es conocido que nunca los balones han golpeado a los niños, luego es preciso defenderlos de tan letales enemigos) por lo que hay que prohibir los balones.

Concluimos una cosa, algo falla en nuestra sociedad. Tras el tsunami al que hago referencia al principio el bienpensante mundo occidental ha entrado en su eterna guerra izquierdas-derechas (es decir se ha dedicado a mirarse a su ombigo), según la cual para las izquierdas lo nuclear es algo malo malísimo y para las derechas lo nuclear es bueno buenísimo, olvidando que ese desastre natural ha segado vidas (eso parece no importar). Por otro lado prohibimos a los niños jugar en los patios con peregrinos razonamientos de protección hacia los menores.

Sociedad que legisla solo para prohibir = Sociedad enferma.

¡Salud!

3 comentarios:

  1. Es que el fútbol, como deporte de equipo que es, es excluyente.

    Informes poco fiables, me comunican que el plan de la dirección del colegio es sentar a todos los niños en el patio y obligarlos a sonreir.

    :)

    ResponderEliminar